La Italia Veracruzana: Il Veneziano

Mi historia en uno de los restaurantes más conocidos de comida italiana en la zona Veracruz-Boca del Río. Al principio todo parecía ir bien, pero después...

Ambiente

Desde el momento que se pone un pie en la puerta de Il Veneziano, ya se siente la atmósfera italiana. Todo está decorado para crear un entorno de casa italiana, además, la música de fondo y el vestuario de los meseros con un outfit veneciano hace que el cliente totalmente se desconecte de su realidad y se sienta fuera de Veracruz.

Mis amigos y yo nos ubicamos en una mesa cercana al horno y a la caja, a pesar de que el lugar estaba un poco lleno, el ruido de las otras conversaciones no inundaba el lugar, por lo que pudimos tener una charla agradable.

Comida

En esta ocasión ordené unas ravioles rellenos de espinacas y bañados en una salsa de queso gouda con pera y encima tenía trozos de nuez y pera. Para tomar pedí una naranjada natural.

De mi platillo puedo rescatar el relleno de los ravioles, pero desgraciadamente fueron opacados por la salsa que estaba muy pasada de sal, por lo que a pesar de que probaba los trozos de pera independientemente, sentía toda la sal y no lograba sentir ese sabor dulce que esperaba.

Por otro lado, la naranjada al principio estaba muy dulce, pero se entiende que es para evitar que se quede sin sabor al descongelarse los hielos.

Una de las cosas que me parece importante resaltar es que entre su menú de rollos tiene una opción para las personas vegetarianas.

Por último, el pan que dan de entrada con el chimichurri estuvo rico como siempre, aunque en lo personal prefiero comer ese pan sólo porque lo disfruto mejor.

Atención

La atención fue regular, ya que tardaron en traer los platillos; sin embargo, esta situación se puede justificar ya que había demasiada gente, pero casi se les olvida traer mi bebida; no obstante, como estuvieron pendientes si nos faltaba algo, rápidamente se dieron cuenta del olvido.

También, debo resaltar que un mesero fue muy amable porque una amiga pidió profiteroles y tuvo la consideración de decirle que no los debía pedir con mucha anticipación porque se le podían derretir, por lo que le sugirió que los pidiera unos minutos antes de irse.

Pero, uno de los errores más graves fue que al pagar la cuenta, el mesero creyó que dentro del pago iba la propina; sin embargo, el cambio acumulaba más del 10% de propina y además, pensábamos dejarla aparte. Este aspecto nos retrasó y además provocó que a una de mis amigas no le regresaran completo su cambio.

Otro aspecto negativo fue al salir y esperar el valet parking, ya que como hubo de cambio de turno del personal, los empleados a cargo estaban un poco desinformados y por lo tanto, el servicio estaba teniendo problemas.

Higiene

Todo el recinto, desde la entrada, lucía limpio y en buenas condiciones. Los empleados también portaban uniformes pulcros y manejaban con mucha higiene los alimentos.

Los sanitarios estaban impecables, todo estaba bien cuidado, desde el aroma hasta la limpieza de los vidrios (aspecto que en ocasiones se llega a descuidar).

Precio

Los precios van de acuerdo a este tipo de restaurantes, el costo de los platillos ronda entre 100 y 200 pesos, pero valen la pena por el tamaño de la porción. Las bebidas si están algo caras, ya que la naranjada me costó como 30 o 40 pesos y era un vaso mediano, por lo que si no se quiere gastar mucho en este aspecto lo mejor es ir racionando la bebida o pedir un vaso con agua al terminar nuestra naranjada. Como lo mencioné antes, recomiendo tener cuidado al momento de pagar la cuenta, no les vaya a ocurrir el incidente de que les quieran agregar la propina, cuando ustedes planeaban darla por separado.

Instalaciones

En este aspecto debo reconocerle a Il Veneziano su gran dedicación por cuidar cada detalle, ya que desde el exterior toda la decoración hace que el lugar parezca una casa italiana. Por dentro los accesorios son magníficos, tienes una pecera mediana y un estanque para tortugas. Descubrir estos detalles fueron una sorpresa increíble que le da vida al lugar y que es un lindo detalle visual para los consumidores. Igualmente, los baños tiene un decorado muy fino con madera y un candelabro; todos estos aspectos se agradecen porque no dejan que se rompa la atmósfera italiana que el lugar tiene a simple vista.

También, en el lugar hay diversas decoraciones que hacen referencia a la cultura italiana y veneciana; por ejemplo, hay cerditos con la vestimenta veneciana y hasta una zona con un horno donde hay canastas de pan, lo cual hace que cada todo el espacio tenga uniformidad.

Una de las cosas que me gustó mucho fue el área de la caja de cobro, ya que su estilo me recordaba a la escenografía de la película Gran Hotel Budapest.